El ministro de Economía, Luis «Toto» Caputo, anunció que en marzo habrá un aumento del 30% para los jubilados, junto con un bono adicional cuyo monto aún no se ha especificado. Este incremento busca compensar la pérdida del poder adquisitivo de los jubilados, resultante de políticas anteriores. Caputo también anticipó que la inflación de febrero será menor al 15%, reflejando un control fiscal y monetario más estricto.
En relación con la Ley de Movilidad Jubilatoria, el ministro criticó su eficacia, señalando que no protege adecuadamente los ingresos de los jubilados y propone cambios para evitar mayores perjuicios a este grupo. Además, Caputo destacó la importancia de fijar un aumento del salario mínimo, que también rondaría el 30%, en línea con las medidas destinadas a mejorar las condiciones económicas de diversos sectores de la población.
En cuanto a las proyecciones económicas a futuro, Caputo expresó optimismo, señalando una posible recuperación económica más temprana de lo previsto inicialmente. Destacó el esfuerzo de la población y reiteró su compromiso con el servicio público, enfocándose en el bienestar de la gente. Sus declaraciones apuntan a generar confianza en las políticas económicas implementadas y en el futuro del país.
Los anuncios de Caputo reflejan una estrategia gubernamental para abordar la situación económica actual, buscando mejorar la situación de los jubilados y proteger el poder adquisitivo de la población. Estas medidas se enmarcan en un contexto de control de la inflación y la búsqueda de un crecimiento económico sostenible.