La reacción ante esta ola de violencia no se ha hecho esperar. El gremio docente Amsafé ha anunciado un cese total de actividades en las escuelas públicas, calificando la situación como «terrorismo urbano» y denunciando la inacción del gobierno provincial. Además, se ha confirmado la continuación del paro de colectivos y taxis, en solidaridad con las víctimas y ante la falta de garantías de seguridad para los trabajadores del transporte.
Los líderes sindicales también han expresado su preocupación y solidaridad ante los trágicos sucesos. Horacio Yanotti, secretario general del Sindicato de Peones de Taxis, ha lamentado la falta de combustible debido al cierre de estaciones de servicio, lo que impide la prestación del servicio y pone en riesgo la seguridad de los trabajadores. Por su parte, Marcelo Andrada, secretario del Sindicato de Recolección y Barrido, ha anunciado la suspensión del servicio de recolección ante las amenazas recibidas por parte de las bandas delictivas.
En medio de esta crisis, el Gobierno Nacional ha conformado un comité de crisis en la provincia de Santa Fe para enfrentar el problema del narcotráfico y la violencia. Sin embargo, la población sigue clamando
